Disfrutando de un paraiso "turistico" filipino: Boracay.







Volando en una avioneta de helice y tras alucinar con el concurso de karaoke que la tripulación del vuelo organizo para los pasajeros, aterrizamos dando tumbos en la pista de Caticlan, Boracay.

Se trata de una isla perdida de las Visayas, con una playa de arena blanca y cocoteros de mas de 3km, un horizonte teñido por los colores de las velas de las "bangkas" (barcas tradicionales), y un ambiente de alegria y relax que flota en el ambiente.
El unico inconveniente de paraisos como este, es que quien en este planeta no quiere disfrutar de ellos...?!?
Con lo que el turismo cada año esta creciendo a pasos agigantados, contribuyendo a que se vaya perdiendo el encanto e incluso echando a perder rincones secretos del mundo. Que le vamos a hacer...

La isla ofrece todas las actividades imaginables. Desde mi deporte favorito, el Kite surf en la playa este de Bulabong, a paseos en barca tradicional, snorkel y buceo, parasailing, el clasico banana, wake, etc.etc.etc. Y para los que no quieran mover ni un musculo de su cuerpo, tambien pueden elegir entre darse 1001 masajes a pie de playa, pedicuras y manicuras, o hacerte un tattoo mientras te tomas un super "Fruit-shake" bien freskito!
Durante el dia existe una relativa tranquilidad, pero en el Sunset es como si toda la gente, turistas y locales acudiesen a la playa como un ritual de cada dia para despedir al radiante sol...
Y por la noche, la isla se convierte en animacion, musica en directo, restaurantes y mucha fiesta hasta el nuevo amanecer!
En definitiva, creo que esta isla es lo que hubiera soñado Robinson Crusoe al estar en un paraiso tan abandonado, solitario y sin nada civilizado. (Quiza seria demasiadooo y acabaria huyendo a nado...)pero algo de ambiente o gente ya echaria en falta...

El entorno y el sitio es increiblemente bonito, y dispone de todos los servicios para disfrutar, descansar y dejar que cualquier preocupación desaparezca en sus cristalinas aguas.
Eso si, como siga creciendo a este ritmo, en muy breve, este sera un paraiso menos...

Ahora nos vamos hacia el oeste, hacia la isla de Palawan, con las expectativas muy altas por conocer el rio subterraneo que discurre por la isla, la inmaculada ciudad de Puerto Princesa y los acantilados de "El Nido".

"Magandand gabi!" = "Buenas noches".

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